Asado donde el Gallo !

Pato Broerse y su primo llegaron a las 6 am a la pega, directamente desde Viña, a desayunar. Felicidad! al fin compañia nueva para romper la monotonia! Uno se da cuenta que en verdad aun no esta del todo asentado en un lugar cuando depende tanto de las visitas para disfrutar la vida. Sali a eso de las 8:15 de la pega y nos fuimos a casa. Despertamos a Sebastian, que se aparecio rápidamente en su auto nuevo-viejo a buscarnos para "ir de compras". El prospecto de un asado de camaraderia realmente entusiasma a Sebastian...
Las compras consistieron en lo de costumbre y algunas variaciones. A pesar de mi conservadurismo en temas de vodka, esta vez decidi innovar y en vez de Stolichnaya compré Skyy. Sebastián insistió en que compráramos abastero, y finalmente tres packs de cerveza (mejor no menciono la marca) y unas botellas de vino "quijotesco" (de cuyo nombre no quiero acordarme).
La experiencia: En verdad Sebastian le pega al asado. Dejar el Abastero tan blando como lo dejó es un mérito a la paciencia. Como este era un asado eminentemente masculino, la única ensalada que habia era un pebre bastante correcto y suave (¡sí, califica como ensalada!). Los Bloody Marys y Vodka Tónicas quedan ricos con Skyy, reconozco que además es absolutamente cero-caña, una peculiaridad a tener en cuenta. Del vino ni probé. Una cosa es tomarse un traguito en un asado antes de irse a trabajar y otra es empezar a mezclar, y mas encima tragos aromáticos.

Los demás se fueron a carretear, y yo claro a trabajar. Cosas del oficio. La noche estuvo bien regada para los que siguieron fiesteando, cuando llegué a casa en la mañana habia dos estropajos humanos en la pieza de alojados.

Como conlusiones finales, esto de los asados del Sebastian me esta quebrantando las costumbres: una vez a la semana estoy comiendo carne en cantidades indignas. De hecho la sed y la sequedad en la boca que me dejaron es signo inequívoco de la poca costumbre de comer carnes que he adquirido. Tendré que ecualizar durante la semana el asunto con agua y cosas verdes. Y la próxima vez que me invite, no me dejaré obligar: o bien me traigo mi parrillita de pescados o bien me traigo las berenjenas y las demas cosas listas y pre-adobadas.